Desmontando bulos. Para las quemaduras… Sal

“Ni pomadas, ni cremas, ni apósitos…” De esta forma comienza el post hallado en Facebook que promete el remedio para todas las quemaduras. Además cita la fuente, de forma muy imprecisa, “ un forero que trabajaba en cocina”. Pues aquí lo tenemos, se está cocinando un bulo, sal incluida.

¿Cómo se clasifican las quemaduras?

Las quemaduras según su afectación a las diferentes capas de la piel, se clasifican en:

  • Primer grado: Superficial, afecta a la epidermis. La quemadura solar es un ejemplo.
  • Segundo grado: Lesionan epidermis y dermis, a su vez pueden dividirse en superficiales y profundas. Si aparecen ampollas, lo habitual es que se trate de una quemadura de segundo grado.
  • Tercer grado: Profundas, afectan a todo el espesor de la piel e incluso a tejidos y estructuras más profundas.

¿Cómo surge el mensaje de curar las quemaduras con sal?

La referencia proviene de 2016 y, poco a poco, ha ido extendiéndose hasta que se ha convertido en viral. Previamente hay diversas páginas que hacen referencia al agua con sal (abundante), como tratamiento de las quemaduras, sin embargo son páginas sin rigor científico.

Posiblemente el bulo parte de la idea de que la sal se utiliza como conservante, pero es importante remarcar que la sal actúa deshidratando los tejidos y evita la putrefacción, esto sucede en tejidos muertos. En tejidos vivos el impacto es diferente.

¿Por qué NO debemos aplicar sal a una quemadura?

La sal actúa irritando la zona y agrava la inflamación. Produce deshidratación del tejido por efecto osmótico (absorbe el agua de aquellas células que estén dañadas) e impide que se lleve con normalidad el proceso de curación. Cabe destacar que favorece la aparición de infecciones por manipulación y aplicación de un producto del que desconocemos su estado.

En las quemaduras de segundo y tercer grado, se produce una alteración en la barrera estructural de la piel, lo que favorece la aparición de infecciones y la pérdida de los mecanismos de protección y regulación, motivo por el cual estos efectos sucederán con mayor intensidad.    

¿Qué hacer ante una quemadura?

La actuación, por lo general, se basará en eliminar la causa de la quemadura, y lavar con agua fría para disminuir la inflamación y minimizar la lesión.

En las quemaduras de primer grado, será suficiente con esta media, sin embargo si es muy extensa se recomienda además abundante hidratación por vía oral.

En el caso de las quemaduras de segundo grado no debemos manipular ni romper las ampollas  que se han formado, se lavarán con agua fría (20 a 30 minutos) se desinfectarán con un antiséptico y sólo posteriormente se aplicara una pomada preparada específicamente para quemaduras.  Si la ampolla está rota, la trataremos como una herida.

En las quemaduras de tercer grado, hay que evitar retirar la ropa o manipular el área quemada, podríamos empeorar la situación desprendiendo capas de la piel que estén afectadas, las instrucciones son: Lavar con agua fría abundante, vigilar en nivel de consciencia, respiración y pulso. Traslado inmediato a un centro hospitalario. Es importante evitar la aparición de hipotermia.

No es recomendable aplicar pomadas, ungüentos, pasta dentífrica, aceite, sal… De forma precoz, ya que es un problema luego para retirar los restos y puede empeorar la lesión. Inicialmente en las quemaduras, sólo agua fría, sin sal.

Pacientes SEMERGEN

  • Dr. Fernando Mª Navarro i Ros
  • Dr. Javier Precioso Costa

1 comentario

    He escuchado que poniendo harina sobre las quemaduras ayuda a disminuir el dolor y acelera la curación, hay evidencias científicas para esta aseveración?

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