Existen bulos estacionales como el que asegura que al encender el aire acondicionado cuando el vehículo está estacionado a pleno sol aumenta el riesgo de cáncer por el aumento de los niveles de benceno.
Desmontando el bulo
Aunque este componente sí es tóxico y para manipularse deben extremarse las precauciones de seguridad, los coches son seguros. De hecho, cuando el coche sale de fábrica el benceno que hubiera podido usarse para elaborar alguno de sus materiales ya está más que evaporado.