Este pasado fin de semana podíamos leer el siguiente titular en un medio de comunicación “Adiós alopecia y puntas abiertas: un peluquero patenta una tijera que corta el pelo a fuego”. Se trata de una noticia en la que describe el invento de un peluquero valenciano, unas tijeras que además de cortar el pelo, queman el tallo piloso. Además, según asegura su inventor en el artículo, es una técnica que tiene la propiedad de evitar la caída del cabello mediante este tratamiento térmico extremo o sellado de puntas a fuego.
El artículo, en el que ya ha sido cambiado el titular, hace una mención a dermatólogos y biólogos capilares sin citar a ninguno en concreto ni a ninguna sociedad científica. A estos dermatólogos los atribuye que “han confirmado que el cortado a fuego es el tratamiento más efectivo” ante la caída del cabello. Un argumento que desde #SaludSinBulos queremos desmentir ya que no hay ninguna evidencia científica que demuestre que producir una quemadura con calor u otras herramientas a nivel de la fibra capilar y del tallo piloso produzca una disminución de la caída de pelo ni una mejora de ninguna forma de alopecia.
Desde la dermatología y la tricología, el área de la dermatología que se ocupa de los problemas capilares, rechazamos esa afirmación de que esto esta idea esté apoyada por dermatólogos.
Raíz folicular
Hay que destacar también que la caída de pelo y la alopecia dependen de la raíz folicular, una estructura situada tres milímetros bajo la piel del cuero cabelludo y que por tanto, las acciones que se realizan del cuero cabelludo para afuera sobre el tallo piloso como puede ser aplicar tintes, lacas, champús, gominas o, como en esta medida, quemar el pelo, no producen ningún tipo de mejoría.
Esta tendencia puede ser muy peligrosa porque puede producir quemaduras, no solo en el pelo y producir una destrucción cosmética, también quemaduras en el cuero cabelludo y es muy importante que se sepa porque es una práctica peligrosa.